Las nuevas tecnologías que permiten internacionalizar una empresa o una marca han hecho a las empresas evolucionar para mantener vigencia y relevancia para sus clientes haciendo frente a sus competidores, estos nuevos avances se dan de la mano entre el talento humano y el correcto uso de la tecnología.
De esto se encarga la gestión de la tecnología, que sirve como un enlace entre la parte humana (el talento, la inventiva) y la parte directiva de la organización, para lograr que la información fluya por toda la estructura y todos sean participes de los nuevos procesos que se crean de acuerdo al uso e implementación de las nuevas tecnologías, todo esto con el objetivo de satisfacer una necesidad del cliente y de dar un plus que no ofrecen sus compañías rivales, con la tecnología como apoyo del talento se logran mejorías en procesos ya establecidos o la creación de nuevos procesos que llevaran a una compañía a un nuevo nivel, minimizando costos y riesgos y aumentando la productividad que es la meta final, más calidad y más cantidad.
La tecnología en una empresa se puede dividir en dos aspectos importantes, uno físico que está dado por la maquinaria que lleva a cabo tareas comandadas por la parte no tangible, la parte de la que nacen las ideas y que tiene la experticia para que la maquinaria opere y cumpla sus tareas en niveles altos.
En una visión general, la gestión de la tecnología se encargaría de controlar que los procesos que tienen que ver con la producción se lleven a cabo de manera optima y usando los recursos tecnológicos disponibles en el mercado que hagan que estas tareas se realicen de forma optima, minimizando costos y brindar el respectivo feedback a la parte administrativa de la compañía, la encargada de tomar decisiones sobre el negocio además de nutrir a la parte operacional con capacitaciones sobre el correcto uso y manejo de las tecnologías disponibles.
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